Archivo de la etiqueta: david bisbal

Las fans ya no gritan

Estándar

El fenómeno fan, como todo fenómeno social, ha cambiado. Llevo un tiempo observando comportamientos por parte de fans de distintos estilos, y me he dado cuenta de que las reacciones antes determinados aspectos relacionados con un ídolo no son los mismos que un tiempo atrás. Ya hace tiempo que le voy dando vueltas a esta idea, pero no fue hasta este sábado, con David Bisbal a medio metro de mí, cuando me di cuenta.

la foto (20)

Creo que parte de la culpa de este viraje viene dado por las redes sociales e internet. Era evidente que las facilidades que ofrece la red iban a provocar un cambio natural en el sentir y hacer de los seguidores de un artista. Veamos por qué.

Hace unos años, y no tantos, los fans obtenían información de sus artistas de unos pocos canales: tv, radio y revistas especializadas. En televisión había programas específicamente musicales como Zona Franca, Música Sí o del 40 al 1, aunque la mayoría de espacios de entretenimiento de peso como Sorpresa Sorpresa!, Noche de Fiesta, Día a Día, Sabor a ti, etc. también incorporaban actuaciones en directo de artistas que estuviesen de promoción. Vaya, que todos esperábamos con el mando del VHS en la mano para dar al REC y grabar el videoclip o actuación del cantante que nos gustaba.

Los recortes de prensa o los programas de radio especiales dedicados a un cantante o grupo se atesoraban como reliquias para poder escucharlos una y otra vez. No, no había podcasts ni hemerotecas digitales ni Google para buscar imágenes recientes de un famoso. No existía Youtube para ver videos del concierto que Madonna estaba dando esa misma noche en Brasil, ni Facebook para saber qué pensaba Mariah Carey ni Twitter para decirle directamente a Ricky Martin que nos encantaba su tema “María”.

Todo estaba mucho más dosificado y diría que hasta más trabajado, y eso daba un valor añadido a todo lo que se movía en la industria musical. Ser de los pocos que tenía el single inédito de Take That cuando decidieron separarse era una de las mayores suertes. Ahora con meterte en Spotify lo puedes oír cuando quieras.

Tal vez las nuevas generaciones no lo entiendan porque ellos han nacido de pleno en la era digital, donde lo más lógico es que tu artista acabe dándote un Retweet o hasta te conteste directamente en Twitter. La magia del coleccionismo, el saborear cada nuevo dato que se obtenía, se ha ido perdiendo con la saturación de inputs que tenemos en la actualidad. El tráfico de nuevo datos de One Direction, por ejemplo, es tan elevado que dudo que cualquier fan pueda estar al día de todo lo que se publica. Me parece imposible.

Y parece ser que no solo se ha perdido ese ansia por saber ni los nervios durante semanas por ver imágenes de la grabación del nuevo disco de Shakira… también se han perdido los gritos. ¡¡Las fans ya no gritan!! De hecho…es que ya ni se desplazan para ver a su ídolo. Hablo en este caso de lo que vi con David Bisbal este fin de semana. Inmerso en la promoción de su nuevo disco, el sábado pasado visitó los estudios de los 40 Principales y apenas consiguió agolpar a 50 personas en las puertas de Prisa. Y digo personas porque muchos de los presentes ni siquiera eran seguidores aférrimos del almeriense, sino cazadores de famosos que buscaban la foto con Bisbal para colgarla en Instagram. Sin más.

la foto (21)

No creo que el problema esté en Bisbal, quien por cierto ha estado hace un rato cantando en los cines Callao. El problema está en que por mucho que nos guste la música de alguien concreto, si ese artista está continuamente expuesto en tv (el caso de Bisbal en La Voz) y tenemos la facilidad de obtener material suyo a golpe de click… ¿Dónde queda la emoción? Hace 15 años si se anunciaba que en Fan Club estaba Enrique Iglesias como invitado, en menos de 20 minutos la policía debía cortar la calle a causa de la avalancha de seguidores que acudían a verle. ¿Qué ha pasado para que eso ya no ocurra? Pues que se ha normalizado tanto al artista que lo que antes nos resultaba insólito hoy en día es lo habitual, pocas cosas consiguen llamarnos la atención y provocarnos esa emoción que manifestábamos a base de gritos. Siento nostalgia de ese movimiento fanático que hace unos años conseguía movilizar masas sin necesidad de redes sociales o whatsapp. Nostalgia que las de mi quinta compartimos, nostalgia que las adolescentes de ahora no entienden. Yo moría por una firma de discos. Ellas mueren por un retweet. Esta es la nueva era del fenómeno fan, sin más.